domingo, septiembre 04, 2005

Agua Turbia

Ser Piscis no es una casualidad para mí. Mi ánimo y carácter se han formado igual de ondulantes que las olas del mar. Y mi alma, se escurre como un pez bajo el agua, ocultándose temeroso de grafios, redes, anzuelos y factorías. Sin embargo, como la espuma, existen en mí sentimientos evidentes, claramente evidentes, que con honestidad debo confesar no sé cómo existen personas que no los perciben. Incluso tú, que has compartido conmigo buena parte de mi vida, no has sido capaz de aceptar lo que te he mostrado. He mostrado poco, es cierto, pero he mostrado de lo bueno y lo malo; no podrías quejarte. Entonces aparecen las dudas... ¿ cómo he de pretender que alguien ajeno reconozca mi sentir? ¿ como pedirle a un par de ojos de crital ver bajo el agua turbia? ¿cómo?
Siendo Piscis, volveré a la parte profunda del mar, reposaré un tiempo, tal vez duerma... Mañana, en la superficie, desnudaré mi ojos a tu vista, y serán el agua la sal quienes calmen los heridos, y bañen a los enamorados...